Categories:

Si antes la acústica en la arquitectura se la vinculaba mayormente al control del sonido en los lugares, cada vez más entendemos que hay una relación directa entre la acústica de un espacio y cómo nos “sentimos” en él y cómo afecta la salud más allá de cómo percibimos los sonidos.

Además de la molestia o la sensación de incomodidad que nos puede producir el ruido en nuestros hogares, lugares de trabajo o de estudio, los efectos del ruido que son negativos para la salud pueden ser muchos.

Desde lo más extremo como el daño auditivo cuando estamos expuestos a elevados niveles de ruido por tiempos prolongados, también la falta de comprensión de la palabra si el nivel de ruido ambiental es muy alto o también porque hay un exceso de reverberación, el ruido también produce una disminución del rendimiento ya que nos distrae y dificulta la concentración, produce perturbación del sueño, hipertensión, problemas al corazón….

Por lo tanto, es muy importante abordar el diseño de los espacios que habitamos pensando en el confort acústico. Como cualquier otra especialidad que interviene en un proyecto, requiere que sea abordado por un especialista ya que eso ayuda a tomar mejores decisiones, desde la selección de los criterios de diseño que son necesarios de aplicar hasta cuales son las soluciones más adecuadas que se deban implementar.

Tags:

Comments are closed